Informe especial revela que Cali es una ciudad sólida financieramente

Departamento Administrativo de Hacienda

Juan Carlos Zapata M. – Oficina de Comunicaciones

Los principales indicadores financieros resaltan el buen desempeño y su posición favorable en comparación con otras ciudades capitales del país.

El próximo alcalde o alcaldesa que llegue a manejar las riendas de la ciudad encontrará una Cali bien gestionada financieramente y podrá ejecutar un Plan de Desarrollo 2024 – 2027 ambicioso.

Desde el Departamento Administrativo de Hacienda se informó que la gestión de las finanzas públicas es un aspecto clave para el desarrollo económico y social de las ciudades. En ese sentido, Santiago de Cali se destaca a nivel nacional por su buen manejo financiero y una alta capacidad de endeudamiento, lo que le permite impulsar proyectos estratégicos de inversión y promover el crecimiento y desarrollo social.

La Administración Distrital ha demostrado responsabilidad en el manejo de la deuda, asegurando la sostenibilidad financiera a largo plazo. Actualmente cuenta con una sólida calificación crediticia y el respaldo de indicadores financieros favorables, tanto esta administración como la próxima, se encuentran en un escenario favorable para impulsar el desarrollo económico y social de la ciudad a través de proyectos estratégicos.

El municipio cuenta con una sólida calificación crediticia: AAA(col) para el largo plazo (Otorgada por Fitch Ratings) y F1+(col) para el corto plazo.

Y es que, durante la administración del médico Jorge Iván Ospina Gómez, se realiza una sinergia entre la inversión social y los proyectos de infraestructura que generen más espacio público, oportunidades, calidad de vida y un compromiso medio ambiental. No obstante, tras la situación de la pandemia se reorientaron recursos para atender necesidades urgentes como redefinir una infraestructura hospitalaria de emergencia, salvar vidas y apoyar a la población más vulnerable para cubrir sus necesidades básicas.

Este sólido desempeño financiero es un reflejo del compromiso de la presente administración en garantizar el bienestar de los caleños mediante inversión social pero pensando en el crecimiento sostenible de la ciudad y la estabilidad de las finanzas públicas, lo cual sostiene una gestión estuvo fuertemente afectada por la pandemia del COVID-19 la pandemia y el estallido social, donde se usó toda la capacidad institucional instalada para enfrentar estos episodios y lograr superarlos sin comprometer fuertemente a las finanzas del municipio y manejando indicadores que pueden dar tranquilidad a la ciudadanía de la planeación adecuada del gasto público en la ciudad.

Actualmente se indica que el saldo de la deuda pública de Cali al corte de agosto de 2022 es de $554.276 millones. Se destacan los acuerdos 0407/2016 y 0415/2017, los cuales han impactado significativamente en el endeudamiento total. Sin embargo, es importante mencionar que se realizaron modificaciones contractuales debido a la pandemia de Covid-19, extendiendo el plazo de pago hasta el año 2030 y esta medida ha permitido liberar recursos para inversión y garantizar la sostenibilidad de la deuda.

Gráfico: Sostenibilidad de la deuda pública (saldo de la deuda/ingreso corriente). Fuente: Departamento Administrativo de Hacienda Municipal.

Durante la presente Administración Distrital y mediante el Acuerdo 481 de 2020, Cali obtuvo la aprobación para contratar nuevas operaciones de crédito por un monto de $650.000 millones. Estas nuevas operaciones se destinaron para fortalecer los ejes estratégicos del Plan de Desarrollo 2020-2023, impulsando proyectos que contribuyen al bienestar de la comunidad y a la reactivación económica de la ciudad.

• Obras de corazón: programa de rehabilitación integral de la malla vial.

• Parque Ambiental Corazón de Pance: en la margen izquierda del río Pance se localiza uno de los proyectos más ambiciosos para la conservación del medio ambiente, considerado el más grande en Latinoamérica con cerca de 90 hectáreas.

• Proyecto Integral Cristo Rey: el proyecto que conectará la zona alta del barrio San Fernando y el mirador, permitirá transformar el espacio con 1,7 km de senderos y 2.100 m de espacio público.

• Semaforización Inteligente: La iniciativa busca incorporar, en una primera fase, un sistema moderno e innovador que permitirá un ahorro del 80% del consumo energético, resistente a las diferentes condiciones atmosféricas y amigable con el medio ambiente, disminuyendo así la siniestralidad y la contaminación. 50 intersecciones en 11 comunas de la ciudad, 37 barrios beneficiados.

• Fondo Solidario y de Oportunidades: estrategia de inclusión financiera y recuperación económica.

• Parque Tecnológico y de Innovación San Fernando: epicentro de la ciencia, la innovación digital y las artes performativas que se desarrolla en el lote del antiguo Club San Fernando.

• Revitalización del IPC: comprende la restauración patrimonial del emblemático edificio Coltabaco y la adecuación de la nueva sede educativa del IPC.

• Parque Pacífico: espacio para las expresiones culturales y ancestrales localizado sobre el corredor del río Cali, entre la Terminal de Transportes y el Parque del Chontaduro.

• Corazón Contento: programa de seguridad alimentaria más ambicioso en la historia de la ciudad que impacta más de 85.000 personas con raciones diarias de comida en 762 comedores comunitarios.

• Todas y Todos a Estudiar: garantizar el derecho a un proceso educativo gratuito, a la promoción e integración laboral y a un desarrollo socio cultural para los jóvenes entre 14 y 28 años de edad con más de 7 mil beneficiarios.

• Bulevar de Oriente: corredor ambiental de 1.1 kilómetros, pensado para mejorar el hábitat y la calidad de vida de los 51.600 habitantes de las comunas 13, 14 y 15.

• Catastro con enfoque multipropósito: instrumento para el ordenamiento territorial que permitirá garantizar información detallada y en tiempo real de la condición jurídica, económica y física de la ciudad.

• Sistema de Transporte Masivo: recuperación de estaciones deterioradas del MIO.

• Construcción Tejido Social en Territorios: implementación de acciones sociales que promueven la participación ciudadana y acciones que contribuyen a la reconstrucción del tejido social en los territorios.

Es importante destacar que, la capacidad de endeudamiento de Cali no solo se basa en indicadores financieros sólidos, sino también en la confianza y credibilidad que ha generado en los mercados financieros. La ciudad ha demostrado ser un destino atractivo para los inversionistas y ha sido capaz de obtener condiciones favorables en la contratación de nuevas operaciones de crédito, lo cual refuerza aún más su capacidad de financiar proyectos importantes para el desarrollo de la ciudad.

Sumado a estas obligaciones de crédito, se debe resaltar que el municipio cuenta con una sólida calificación crediticia: AAA(col) para el largo plazo (Otorgada por Fitch Ratings) y F1+(col) para el corto plazo. Estas calificaciones indican una muy baja expectativa de riesgo de incumplimiento y una fuerte capacidad de pago oportuno de los compromisos financieros.

Se destaca que Cali tiene una capacidad mucho más alta de endeudamiento en comparación con otras ciudades capitales del país como Medellín, Barranquilla y Bogotá.  El siguiente gráfico señala el índice de solvencia que muestra la relación entre intereses y ahorro operacional, entre más baja esta relación de solvencia mayor es la capacidad de endeudamiento de la ciudad.

Gráfico: índice de solvencia (intereses/ahorro operacional). Comparativo con ciudades capitales. Fuente: Estimaciones propias a partir de datos del Ministerio de Hacienda y Crédito Público.

El índice de solvencia es un indicador financiero que evalúa la capacidad de una entidad para cumplir con sus obligaciones a largo plazo. En el caso de Cali, este índice refleja la solidez y estabilidad de sus finanzas públicas. Los datos presentados muestran que la ciudad ha mantenido un nivel de endeudamiento controlado y sostenible, lo que se traduce en una mayor capacidad de pago y una menor dependencia de recursos externos. Esto fortalece la solvencia de Cali y genera confianza en los mercados financieros, lo que a su vez le brinda mayor flexibilidad y capacidad para enfrentar eventuales contingencias económicas.

En este contexto también es importante hacer un análisis de los indicadores financieros de la ciudad, en los que se observa de manera general un comportamiento positivo. Los ingresos corrientes, tanto tributarios como no tributarios, han experimentado un crecimiento constante desde 2016. Además, los gastos totales se han mantenido bajo control, con un enfoque en el funcionamiento y la inversión.

Los caleños son buena paga…

El servicio de la deuda ha sido gestionado de manera eficiente y el superávit primario demuestra la capacidad de generar ahorros para cubrir los intereses de la deuda. Aquí hay que resaltar la gestión de Planeación Municipal y el Departamento Administrativo de Hacienda, ya que, gracias a la actualización catastral se logrará aumentar el recaudo a través del impuesto predial que representa el 72% de los ingresos tributarios de la ciudad, por lo que se espera a 2024 un aumento de los ingresos tributarios que se deben ver reflejados en mayores recursos para la inversión social por parte del Distrito. De igual forma, los contribuyentes presentan un buen comportamiento en el pago de sus impuestos.

Gráfico: comportamiento de los ingresos tributarios 2016-2021. Fuente: Marco Fiscal de Mediano Plazo 2023-2033. Departamento Administrativo de Hacienda Municipal.

Tal como se observa en los datos presentados, los indicadores financieros de Cali reflejan una gestión responsable y eficiente de sus finanzas públicas. El ahorro operacional ha permitido mantener un equilibrio entre los ingresos y los gastos, lo que se traduce en un saldo de deuda controlado y sostenible. Además, el hecho de que los intereses representen un porcentaje bajo del ahorro operacional es indicativo de una buena capacidad de pago y una gestión eficaz de los compromisos financieros.

Finalmente, cabe resaltar que, por normatividad del orden nacional es una responsabilidad de las autoridades competentes mantener indicadores de solvencia sólidos que no comprometan la liquidez y la capacidad de funcionamiento del municipio.

Los indicadores de solvencia, como el índice de solvencia y el indicador establecido en la Ley 671 del 2000, son herramientas clave para evaluar la salud financiera y la capacidad de endeudamiento del municipio. Mantener estos indicadores en niveles adecuados garantiza la estabilidad financiera a largo plazo, evita el riesgo de sobreendeudamiento y preserva la capacidad de respuesta del municipio frente a situaciones imprevistas. Para ello, se cuenta con herramientas como el Marco Fiscal de Mediano Plazo, el cual el municipio está obligado a planificar y a revisar en el marco de lo definido por la ley.